Enmarquemos cada paso, cada pisada en cada camino, continuemos juntos... como desde hace tanto tiempo, que nos encontramos por casualidad, sin que nadie nos dijera nada, sin que las palabras de ninguna persona influyeran en nada de nuestras decisiones. Decisiones que al fin y al cabo fueron gracias a cada mirada de vuelta o cada abrazo... poco a poco. Una historia sin puntos, de esas que no paran en ningún momento; de esas que por mucho que a veces surgen patadas de algún lado no se destruyen. Fuerte. Rígida. Se mantiene. Cierto es que no somos de piedra, pero sin embargo... míranos. Ha habido de todo. Lágrimas, palabras que salieron con fuerza de nuestras bocas sin que podamos controlarlas. Y siempre nos enamorábamos más... No cesa. No acaba. Se mantiene. Cada risa, cada estoy cansado... cada cambia. Y aún así el décimo vamos a seguir, intentemoslo. Te quiero. Te necesito. Me muero por ti. No puedo sin ti. Yo te quiero a ti y a nadie más... El voy a intentar en esforzarme en no cagarla... Te respeto. Y nunca quiero herirte. Los lo sientos... Y aún así quiero más de ti.
... Las emociones. Los recuerdos, y la emoción que produce recordarlos. El primer viaje agarrada a ti. Con el viento chocando en mi espalda, el pelo correteando por todos lados. tu mano deslizándose por la mía. ¿Te acuerdas? Tú olor... que bien olías aquella noche. Parece ayer, que cogiendo aire aspiro tu perfume. Los recuerdos contigo no se esfuman. Recuerdo como me mirabas. Y me doy cuenta que discusión tras discusión tu mirada conmigo no cambia. Me quieres. Y eso es lo mejor que podría tener nunca. Por muchos días que pase a tu lado, no me canso de tu piel, de como sabes, de como hueles, del cosquilleo que produce que tu me acaricies a mi... todo eso, no cambia nunca y nunca cesa, nunca cesa que cada rato que permanezcas a mi lado haga que quiera más. Que tenga claro que en mi cama no hay espacio para nadie mas que nosotros. Cada día tengo más claro que las cosas solo funcionan contigo a mi lado. Que el calor no se enciende en mi cuerpo si no estas tú. Que nada hace que me sienta tan llena como me haces sentir tú cuando me haces reír. nada hace que te quiera menos... pero todo hace que te quiera mas.
Hay días que hacen que renazcas y días que hacen que te pierdas por el camino... no un martes trece, olvídalo. Ya no existe, ahora puede ser un sábado a media luz de la luna siendo un viernes 7. Los días que hacen que te conviertas en alguien especial para alguien, que con una sonrisa su mundo desacelera. Aquellos que con apenas mover dos dedos ya es el mejor de todos, por haberle mirado 4 minutos apoyada en su pecho, mientras hace que te reboten todos los órganos de tu cuerpo como si fueran pelotas que han perdido el control. A veces ocurre que no hay nada que pueda compararse a lo que has sentido en esos segundos. Solo mirarte la cara quizás, que deslumbra de autenticidad, de riqueza... solo por tenerle. Por estar enganchada a sus venas, a su cuerpo, a su alma... que hace que recurras como siempre a su boca para todo. Que ya no es querer ser un día de su vida, ya es mas grande, ahora es todos los días, día sí y día también. Que los recuerdos aquí no existen, que todo es ahora. Todas las sonrisas son ahora, las sonrisas de hola y las sonrisas de no te vayas todavía... porque ya basta de echar de menos aquello. Ahora es hacerlo y ya, mejor que el último. Que si quieres un beso aquí lo tienes y si quieres otro prepárate que vas a querer uno igual y tendrás otro mejor aún. Todo es ahora. Ahora te quiero. Ahora te pienso. Ahora, ahora... ahora es puntual, una hora y ahí está.